Conflicto de altamar
Qué pasa en la milla 201, ese punto crítico al borde del Mar Argentino
Periodista. Locutor.
Buques de mayoría china que depredan al límite de la Zona Económica Exclusiva accedieron a un permiso excepcional. Contexto de un punto crítico en la última década.
La Prefectura Naval Argentina autorizó de manera excepcional el ingreso controlado de una flota de buques pesqueros extranjeros a la Zona Económica Exclusiva nacional única para buscar resguardo. Se debe a un “Preaviso de Temporal” emitido por el Servicio Meteorológico Nacional, que advertía fuertes vientos de hasta 45 nudos y olas de hasta 5 metros de altura.
Se aplica el régimen del “Procedimiento de actuación ante solicitud de la flota pesquera extranjera para ingresar a la ZEE Argentina en busca de resguardo por condiciones meteorológicas desfavorables”. Está previsto en el Régimen Federal de Pesca y en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (Convemar), la Prefectura, en su rol de Autoridad Marítima nacional, asume la responsabilidad de salvaguardar la vida humana en el mar y de hacer cumplir la ley en las aguas argentinas.
La medida, dictada por el ministerio de Seguridad, rige desde el lunes 19 hasta la tarde del jueves 22 de mayo, período durante el cual se prevé que los vientos oscilarán entre 30 y 45 nudos, con ráfagas de hasta 60 nudos, y que el oleaje podría superar los 5 metros de altura.
Se estima que el primer ingreso de buques tendrá lugar este martes, con una permanencia aproximada de tres días, siempre bajo la estricta supervisión de la Prefectura a través de su Sistema Guardacostas y sus distintas estaciones costeras.
Entre las condiciones impuestas para autorizar el refugio, se incluyó la prohibición absoluta de realizar tareas de pesca, investigación y exploración. Todos puntos incluidos en la Convemar. También se exige mantener apagadas todas las luces propias de operaciones pesqueras; y la conservación de las artes de pesca a bordo, sobre cubierta y debidamente trincadas.
Los buques también deben mantener encendidos de forma continua sus equipos de posicionamiento y comunicaciones AIS para permitir el monitoreo permanente de su ubicación, y permanecer en escucha permanente en la frecuencia marítima 4134 kHz (canal L3A), informando su posición a las 02:00, 10:00 y 18:00 horas cada jornada.
Preocupante avance de pesqueros extranjeros
La Milla 201, justo al límite de la ZEE argentina, se convirtió en un punto crítico donde operan cientos de buques chinos en su mayoría pero también de Taiwán, Corea del Sur, España, Uruguay, Portugal, Rusia y Belice. Se llevan calamar y merluza, aprovechando la desembocadura de corrientes ricas en nutrientes para maximizar capturas.
En la última década, la actividad de pesqueros extranjeros en el borde del Mar Argentino, especialmente de la flota china, se ha incrementado de manera exponencial, con un crecimiento del 800 % en las horas de pesca en la Milla 201 según datos de Global Fishing Watch analizados por el Círculo de Políticas Ambientales.
“En Argentina la pesca ilegal no es delito”
En base a este contexto, Newstad consultó al perito naval Fernando Morales, quien no fue muy alentador sobre este panorama: “No podemos hacer demasiado. No podemos salir a tirarle a un barco porque no te olvides que tenemos un Swap con los chinos”.
“Tenemos una ley nacional que habla de la preservación de las especies transzonales, es decir las que son propias de nuestra plataforma continental pero entran y salen de las 200 millas, pero no la podes aplicar fuera de las 200 millas”, argumenta luego Morales.
¿Están depredando? “Si, es verdad”, contesta enfático el especialista, pero rápidamente agrega: “Pero no hay mucho más para hacer sobre todo en Argentina donde la pesca ilegal no es delito. Acá pescás ilegalmente, pagas una multa y listo”.
La conclusión de Morales es todavía más tajante: “Tampoco tenemos poder de fuego ni persuasión. Podríamos molestarlos con buques militares o policiales para que se vayan más lejos, pero no hay plata para eso ni la va a haber”.
Por este punto clave permanece la duda sobre si efectivamente están siempre en la Milla 201 o cruzan a aguas territoriales. Sin embargo ya hace unos años, el piloto y cineasta Enrique Piñeyro lo pudo constatar: “Volamos a 5000 pies sobre la flota pesquera extranjera que depreda nuestros mares, y provoca desastres ecológicos. No estaban en la milla 201, estaban bien adentro de nuestras aguas territoriales”.
Mientras la duda sigue, avanza el perjuicio para la Argentina: mientras que buques de nuestra bandera tienen regulaciones dentro del Mar Argentino, los extranjeros hacen lo que quieren a partir de la rica Milla 201. Sin acuerdos internacionales, o al menos binacionales por ejemplo con China, este escenario de depredación no va a cambiar, amparada en el vacío legal de altamar.