Empresarios "nacionales y populares" le dejaron un tajante mensaje a Cristina Kirchner y Axel Kicillof

La Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC) emitió un comunicado en el que defendió el rol del empresariado nacional y cuestionó con dureza a la dirigencia política tradicional.

"Los empresarios y empresarias nacionales sí tenemos un proyecto de país y de Nación. Lo venimos sosteniendo con compromiso desde hace más de diez años, con un rol activo en la vida democrática e institucional de la República Argentina", introduce el texto de la organización que preside Leo Bilanski.

Desde ENAC, organización que se define como la última en nacer con valores nacionales y populares, remarcaron su visión: “invertimos, somos federales, pagamos impuestos y generamos empleo genuino para miles de trabajadores y trabajadoras, sin distinción ideológica”.

El documento que enviaron a Newstad incluye fuertes críticas hacia el Partido Justicialista, al que acusan de no haber escuchado las advertencias del sector empresario frente al avance de las corporaciones sobre la política. 

Llegan entonces las palabras dirigidas puntualmente a Cristina Kirchner: “Hemos realizado innumerables esfuerzos para sensibilizarla a usted, en su rol de máxima autoridad del Partido Justicialista nacional".

El mismo aviso va a "las autoridades del PJ bonaerense, incluido el actual gobernador de la provincia de Buenos Aires, respecto a los riesgos de persistir en decisiones desacertadas en materia de conducción política, particularmente en lo que respecta al vínculo con las corporaciones. Lamentablemente, no escucharon”.

“La política partidaria tradicional no está preparada para conducir a la Argentina hacia un verdadero proceso de desarrollo nacional”, afirma luego el texto.

También denuncia que “empleados de la política” cooptaron los espacios institucionales y de debate, impidiendo la modernización del sistema representativo. Y cuestiona el rol dominante de los economistas desde los tiempos de Cavallo hasta hoy, por “dictar qué hacer y qué deshacer con el Plan Productivo Nacional”, terminando en reiteradas crisis de deuda.

Bilanski le avisa a Cristina Kirchner y Axel Kicillof la postura del empresariado nacional adherido a ENAC: “No queremos adherir al Partido Justicialista, hoy vaciado de contenido y muy alejado de los principios que alguna vez lo identificaron”.

Finalmente, se hace un llamado a una alianza histórica entre el movimiento obrero y el empresariado nacional, como vía para recuperar los principios de independencia económica, soberanía política y justicia social.

Sobre el final, el texto apela al sentimiento de urgencia frente al avance de la pobreza y la pérdida de esperanza en amplios sectores de la sociedad: "Nuestro pueblo está sufriendo. Todos los días hay más pobreza y se desvanece la esperanza de una vida digna […] Nos esperan momentos difíciles. Las decisiones que requerirá nuestra Nación serán complejas y no podemos seguir profundizando la grieta".