Crisis política en España
La corrupción arrincona cada vez más a Sánchez

Periodista.

Su principal socio de la oposición pidió una reunión urgente con el presidente. El viernes hubo disturbios tras una marcha convocada por la ultraderecha.
MADRID (Corresponsal) — Mientras el presidente Javier Milei era homenajeado, aplaudido y ovacionado en la entrega del premio del think thank liberal El Club de los Viernes, en el barrio de Salamanca, una marcha organizada por el partido de ultraderecha VOX, avanzaba desde el centro hasta Moncloa, sede del Ejecutivo, para exigir la renuncia de Pedro Sánchez.
Todo esto ocurría el viernes por la tarde. Al terminar la marcha de VOX, encabezada por su líder, Santiago Abascal, hubo algunos choques con la policía. Una muestra de la crispación de parte de los españoles, quienes ya habían colmado la Plaza de España, el domingo 8, en otra marcha, organizada por el Partido Popular (PP), la principal fuerza de oposición.
Cerca de la medianoche, la policía cargó contra un grupo de manifestantes que, según la versión oficial, convocaban a “tomar la Moncloa”. Eran grupos desprendidos de la marcha de VOX que se desarrolló de manera pacífica. Los jóvenes corrieron desde la calle Ferraz, donde está la sede del PSOE, hacia el Parque del Oeste, donde ocurrieron los enfrentamientos. Hubo destrozos de mobiliario urbano y lanzamiento de objetos contra los efectivos que respondieron con gases lacrimógenos.

El jueves, había estallado lo que ya podría llamarse Sánchezgate, en alusión al famoso Watergate, la investigación periodística que terminó con el gobierno de Richard Nixon en los años 70. Es que, al igual que el legendario Watergate, fueron los medios quienes impulsaron las denuncias contra Koldo García, Luis Ábalos y Santos Cerdán, los principales protagonistas de una trama de corrupción a la que un informe de la Guardia Civil le pone evidencias bastante claras.
El mismo jueves, luego de la difusión del informe, Sánchez compareció ante las cámaras de la televisión, desde la sede del PSOE. Dijo no saber nada de las maniobras del número tres del partido, Cerdán, a quien le pidió la renuncia a su cargo y a su banca de diputado. También anunció que no adelantará las elecciones, una exigencia del PP, y que seguirá en el poder hasta 2027.
Pero este sábado, el diario La Razón revela que la Fiscalía Anticorrupción vaticina más imputaciones en el llamado caso Koldo, la raíz del Sánchezgate. Los investigadores tratan de seguir el rastro de las supuestas coimas cobradas para favorecer a empresas de la construcción, que ascenderían a más de un millón de euros. La Guardia Civil ya pidió información bancaria a una veintena de entidades, como Intesa Sanpaolo (Italia) y el Commerzbank Aktiengesellschaft (Alemania).
En síntesis, algo muy parecido a las maniobras del kirchnerismo que, también esta semana, condenaron a seis años de prisión a la expresidente Cristina Fernández. Los altos cargos del PSOE les habrían cobrado coimas a los constructores para favorecerlos con obra pública.
Conocido como el “único presidente del mundo” que aguanta cualquier cargo de corrupción (hay otros casos que involucran a su esposa, Begoña Gómez, a su hermano, David, y a la “fontanera” del PSOE, Leire Díaz), la mirada está puesta en sus socios de gobierno.
La vicepresidenta Yolanda Díaz, líder de Sumar, uno de sus aliados, exigió un “reseteo” de las relaciones con el PSOE y tres partidos independentistas, una revisión a fondo de los contratos cuestionados. Podemos ya hace rato parece más un partido de oposición que de gobierno.
Sin embargo, como Sánchez logró su actual legislatura gracias a los votos de los “indepes” catalanes, dirigidos por Carles Puigdemont, más importa lo que haga su partido, Junts. La respuesta llegó esta mañana, cuando el secretario general de Junts, Jordi Turull, afirmó que su partido quiere reunirse en los próximos días con Sánchez, para aclarar si la situación que llevó a dimitir a Cerdán, “impactará sobre el cumplimiento de los acuerdos de la investidura”. Agregó que “del nuevo escenario que se desprenda, el partido tendrá que valorar las decisiones a tomar”.