Streaming, propaganda y militancia.
Peronistas, pero no tanto: Blender bloqueó un inspección por precarización laboral
Diego Abatecola, director de la empresa no permitió el ingreso de la Dirección de Trabajo, según comunicó SATSAID. Errores y una programación que no convence.
Blender es un éxito, es una herramienta lúdica de propaganda del kirchnerismo encarnada por militantes que conjugan ideología con humor y construcción de sentido dentro de la desenamorada juventud con el Peronismo. La justicia había advertido problemas en la legalidad de los contratos de los trabajadores y ayer se comprobó: SATSAID, que agrupa trabajadores no pudieron ingresar para corroborar los cambios en la regularización de los empleados.
El Peronismo no encuentra paz, más allá de la retirada en cámara lenta de Cristina Kirchner y el bajo interés que despertó la vuelta de Sergio Massa, ahora los números de la empresa Blender, fundada para mejorar la intención de voto del Frente de Todos el año pasado, también tiene sus inconvenientes, y de forma paradojal, en una pata que se supone en una empresa con impronta y esencialmente ingresos publicitarios del Peronismo: trabajadores presurizados.
“La inspección conjunta reveló importantes irregularidades en las condiciones laborales y de seguridad en el canal. Su director, Diego Abatecola, al llegar al edificio, se negó a permitir el acceso del sindicato y persiste en no regularizar la situación de las y los trabajadores del medio”, dice el comunicado de SATSAID, que siempre intentó acercar posiciones con el kirchnerismo a pesar de la precariedad absoluta que reina en el sector.
La comisión de SATSAID se hizo presente en las oficinas de Blender junto con autoridades de la Dirección de Trabajo de la Ciudad de Buenos Aires. Si bien en una primera instancia la comitiva pudo constatar importantes irregularidades, como salidas de emergencia bloqueadas y matafuegos vencidos, al llegar el director del canal, Diego Abatecola, se impidió el ingreso del sindicato a las instalaciones.
Tomás Rebord, otrora militante de la casi extinguida agrupación La Cámpora y adlater de Sergio Massa en la última elección, es parte del repertorio que nutre la programación de la empresa. También lo es Pepe Rosemblat, quien ayer no supo explicar durante dos minutos qué es la justicia social en una charla con Alejandro Fantino. El actual novio de Lali Espósito quedó en offside y la mística militante fue diluida en segundo durante la conversación que tuvo con el periodista de Neura.
Malos tiempos para Blender, Olga y otros productos que militan el ideario progresista y de parte del Peronismo. La programación incluye ya a diario un pedido de disculpas de distintos programas por distintos errores que ofenden a distintas comunidades. La gota que rebalsó el vaso fue también un chiste sobre el posible asesinato a Javier Milei, lo que generó polémica y disculpas.
De esta manera, el canal, que emite programas como Desayuno Intermitente, Escucho Ofertas y Hay Algo Ahí, persiste en su negativa a regularizar a las trabajadoras y los trabajadores del medio en el correspondiente Convenio Colectivo de Trabajo 634/11, un reclamo que nuestro gremio sostiene desde hace más de un año y medio.