Caída de la inflación
María Castiglioni: "El dato de mayo confirma que el modelo funciona"

Periodista y Director de Newstad

Alimentos casi no se movió, la canasta básica también retrocedió y es el mes de mayo más bajo en más de una década.
La inflación de mayo fue del 1,5%, tanto a nivel nacional como en la Ciudad de Buenos Aires. El dato, confirmado por el INDEC este miércoles, marca un punto de inflexión: la inflación más baja para un mes de mayo en más de diez años, y sin necesidad de controles de precios, tarifas pisadas ni parches. El número sorprendió para bien y deja en claro que el camino elegido por el Gobierno empieza a mostrar resultados a pesar de que el consumo no se el que se pretende.
“La verdad es que es una muy buena noticia”, aseguró la economista María Castiglioni Cotter, directora de la consultora C&T, en diálogo con Newstad. “La inflación de mayo no solo estuvo por debajo del 2%, sino lejos del 2%. Fue 1,5%, algo que no veíamos hace muchísimo”, destacó.
Según explicó, este dato confirma que el proceso de baja de la inflación sigue firme, incluso después del pequeño rebote de marzo. “Ese mes tuvimos una combinación de cosas: suba de la carne, verduras que aumentaron por las lluvias, algo de incertidumbre con el tipo de cambio. Pero abril ya había empezado a revertir esa tendencia, y mayo la consolidó”, analizó.
Uno de los puntos que más destacó Castiglioni Cotter fue la suba casi nula de alimentos y bebidas, que apenas marcó un 0,5%. “Eso no solo es importante porque se siente en el bolsillo, sino porque bajó la canasta básica alimentaria y la total, que son las que se usan para medir pobreza e indigencia”, detalló. En criollo: la gente que está al límite, esta vez, respiró un poco.
Pero más allá de lo que marca el número general, hay otro dato clave: la inflación núcleo —que excluye precios regulados y estacionales— se ubicó en 2,2%, por debajo del mes pasado. “Es uno de los niveles más bajos de los últimos tiempos. Esto muestra que cuando se ataca la raíz del problema, que es emitir sin respaldo, la inflación baja. Y eso está íntimamente ligado con el equilibrio fiscal, que es la madre de todas las batallas”, dijo Castiglioni.
La mirada hacia adelante también es optimista. “Esperamos que la inflación siga bajando. Eso no significa que todos los meses va a ser menor que el anterior, porque puede haber factores puntuales que afecten, como el clima o los precios internacionales. Pero si el Gobierno mantiene este rumbo económico, la desinflación va a continuar”, aseguró.
Y agregó una proyección fuerte: “Todo indica que vamos a llegar a las elecciones con una inflación que va a estar en el orden del 1%. Tal vez un poco más, tal vez un poco menos, pero ya estamos hablando de un país normal, donde los precios dejan de ser un tema todos los días”.
Según la economista, lo que está empujando esta baja sostenida es la consistencia entre política monetaria, fiscal y cambiaria. “No hay magia. Hay orden. Y eso genera confianza. Por eso muchos sectores incluso están empezando a bajar precios, porque la economía se volvió más competitiva y previsible”, explicó.
Eso no significa que no haya desafíos: los aumentos de tarifas que todavía quedan por delante o el impacto de algunos factores climáticos pueden meter presión. Pero el dato de mayo es claro: el modelo liberal empieza a funcionar en serio.
Y como sintetizó Castiglioni Cotter:
“Si no emitís de más, si cuidás el equilibrio fiscal y no metés la mano en el mercado, los precios se ordenan solos. Eso es lo que está pasando”.