Con el pie derecho
Liderar desde la vulnerabilidad: cuando mostrar grietas fortalece tu autoridad

Master Coach Ontológico Profesional.
El mundo empresarial empieza a reclamar más conexiones genuinas. Los nuevos liderazgos ya dejan de medirse por lo impenetrable, para hacerlo por lo humano; la vulnerabilidad está dejando de ser un tabú para convertirse en un superpoder estratégico.
Mostrar vulnerabilidad ya no es una amenaza al liderazgo; es una poderosa señal de coraje, autenticidad y conexión. Conocé cómo líderes globales transforman sus “grietas” en fortalezas y aprendé a liderar desde un nuevo lugar: más humano, más real, más influyente.
La paradoja del liderazgo moderno
En un mundo obsesionado con la imagen, la perfección y la infalibilidad, mostrar vulnerabilidad se percibía hasta hace poco como debilidad. Pero los líderes más influyentes del presente están cambiando esta narrativa. En la actualidad, la verdadera fortaleza no está en blindarse emocionalmente, sino en liderar desde la autenticidad. En estudios recientes de la “Harvard Business Review” los líderes que admiten errores generan hasta un 76% más de confianza en sus equipos.
Ser vulnerable no significa ser débil; significa tener el coraje de estar expuesto. Significa crear espacios de conexión profunda con los equipos, clientes y comunidades. La vulnerabilidad se ha convertido en una ventaja competitiva y en una de las habilidades más poderosas para liderar con propósito.
Ejemplos que inspiran: líderes que transformaron la vulnerabilidad en legado.
Brené Brown (escritora y profesora en la Universidad de Houston): Brown redefine la vulnerabilidad como “el origen de la innovación” Desarrolló el genial concepto de rumble: -conversaciones que buscan autenticidad y conexión, incluso en medio de la dificultad y la incertidumbre- fueron adoptados por empresas como Google, Pixar, Meta y Microsoft para fomentar culturas de transparencia. En su charla TED con más de 58 millones de visitas Brené Brown sostiene que “La vulnerabilidad no es ganar o perder, es tener el valor de mostrarse cuando no controlas el resultado”.
Jacinda Ardern (ex Primera Ministra de Nueva Zelanda): durante los ataques terroristas en Christchurch (2019) la ex Primera Ministra lideró a su país durante dicha crisis entre lágrimas y firmeza, desde la empatía y la compasión, ganando respeto mundial por su cercanía y humanidad en un momento crucial
Sheryl Sandberg (ex COO de Meta): tras la muerte de su esposo, compartió públicamente su proceso de duelo mientras continuaba liderando. Su apertura humanizó a la organización y fortaleció la cultura interna.
Ed Catmull (cofundador de Pixar): en su libro Creativity, Inc., reveló los errores y dudas vividas en el camino, mostrando que liderar desde la imperfección inspira creatividad y cohesión.
Daniel Goleman (autor del best seller ”Inteligencia Emocional”): en sus conferencias y publicaciones, destaca que reconocer nuestras emociones y compartirlas inteligentemente con el equipo fortalece la credibilidad y la conexión.
Estrategias para incorporar la vulnerabilidad en tu estilo de liderazgo
1️.- Abrí conversaciones reales. Permití que tus equipos te vean como persona, no solo como el cargo que ostentás. Compartí experiencias, aprendizajes y desafíos sin filtro corporativo.
2️.- Mostráte accesible. Habilitá espacios de escucha sin juicio. Liderar también es dejarse impactar por lo que otros sienten y piensan.
3️.- Reconocé errores con altura: no te justifiques y no maquilles. La humildad de reconocer fallos genera más confianza que el silencio o el maquillaje de la realidad.
4️.- Fomentá la expresión emocional. Que mostrar emoción no sea un tabú. Equipos emocionalmente conectados son más resilientes y productivos.
5️.- Capacitá a tu equipo en inteligencia emocional. Promové formaciones internas sobre empatía, comunicación no violenta y mindfulness.
6.- Usá el estilo McKinsey: creá una lista de “cosas por ser” (por ejemplo: paciente o curioso) junto a las “cosas por hacer”, lo que prioriza valores por sobre las tareas, alineando los equipos con propósito.”
7.- Ponéte límites claros (la vulnerabilidad no es sobreexposición): adoptá la regla de oro de Brené Brown “la vulnerabilidad sin fronteras no es vulnerabilidad”. Un directivo puede decir “estoy gestionando un desafío personal que afecta mi energía” sin entrar en detalle de diagnósticos médicos.
Tips prácticos para CEO’s, directivos y ejecutivos en ascenso
- Trabajá desde la empatía activa: en lugar de preguntar “¿cómo estás?” Usá “¿que necesitás de mí hoy? Según un estudio del Babson College se demostró que esta variante incrementaba la confianza en un 68%.
- Mostrá tu vulnerabilidad en forma estratégica: compartí sólo lo relevante. Por ejemplo, si un cliente te cuestiona un retraso decile: “Reconocemos el error. Aquí te traigo nuestro plan de prevención y compensación”.
- Iniciá tus reuniones semanales compartiendo un aprendizaje personal reciente. Eso abre la puerta a conversaciones reales.
- Pedí feedback directo sobre tu estilo de liderazgo emocional: así comprenderás cómo te perciben y especialmente dónde podrías accionar de manera más cercana o auténtica.
- Invertí en coaching ontológico ejecutivo y organizacional: liderar requiere una mirada constante hacia adentro.
- Mostráte como sos, deliciosamente imperfecto, por ejemplo en las redes internas: humanizáte. La perfección genera distancia; la humanidad, cercanía.
- Creá redes de apoyo: formá tu “círculo de vulnerabilidad” con colegas de tu confianza para procesar los desafío sin sobrecargar al equipo.
- Inspirá con historias reales como la de Archana Patchirajan de Hubble: en una crisis financiera compartió con su equipo anécdotas de su infancia en India, donde aprendió a ser resiliente. Sus ingenieros redujeron sus salarios en un 50% movidos por una narrativa de vivencias compartida.
- Celebrá los fracasos: en la empresa Salesforce, los equipos presentan periódicamente un “Premio al error más valioso” destacando las lecciones aprendidas.
- Aprendé de la experiencia de líderes que atravesaron crisis: por ejemplo, podés seguir el modelo instaurado por Jacinda Ardern, Transparencia (datos claros)+Ternura (compasión rigurosa)+Acción (protocolos definidos)
Estamos transitando de la era del líder implacable a la era del líder real. La vulnerabilidad, lejos de debilitarte, es la llave que te conecta con tu equipo, con tu propósito y con un nuevo paradigma organizacional donde la autenticidad se convierte en ventaja estratégica.
En tiempos donde todo parece mostrar sólo lo perfecto, animarte a mostrar tus grietas es un acto revolucionario. Porque es ahí, en ese espacio crudo y honesto, donde nace la verdadera transformación.
Recordá que detrás de cada grieta que mostrás, hay un equipo que encuentra permiso para ser humano. Tal como dijo Mario Benedetti “la perfección es una pulida colección de errores”. Tu vulnerabilidad es el puente hacia un liderazgo que trasciende títulos y construye legados.
“Cuando negamos nuestra historia, ésta nos define. Cuando la poseemos, podemos escribir un final valiente” Brené Brown.