Agroindustria argentina conecta petróleo y criptomonedas
Del agro al Bitcoin: la apuesta energética de Braun Saint

La familia Braun Saint invierte USD 5 millones en BigSur Energy y lleva su legado a la transformación digital.
Durante más de un siglo, la familia Braun Saint ha sembrado historia en el agro argentino. Hoy, ese linaje patagónico cruza fronteras y se adentra en la innovación energética con una inversión de 5 millones de dólares en BigSur Energy, empresa que convierte gas desaprovechado en energía limpia aplicada al Bitcoin Mining.
Fundada por los argentinos Ariel Martín Perelman y Bernardo Hugo Cabral Nonna, BigSur Energy representa una convergencia entre oil & gas, tecnología blockchain y sustentabilidad. Desde Texas y Louisiana, sus data centers modulares off-grid recuperan gas stranded y vented, transformando lo descartado en recurso estratégico.
Para la familia Braun Saint —herederos del legado fundador de Bunge Global y gestores de un family office diversificado desde Suiza— esta inversión no es solo económica, sino filosófica. Carlos Braun Saint se suma al directorio de BigSur con el objetivo de llevar una mirada multigeneracional: conectar el campo con el dato, la producción con la seguridad digital.
BigSur Energy no compite con el consumo eléctrico tradicional: lo elude. Sus módulos operan en zonas remotas, sin red eléctrica convencional, evitando tensiones con industrias y hogares. Al mismo tiempo, proveen infraestructura eficiente y segura para blockchain, un sistema que exige cómputo constante, confiable y descentralizado.
A julio de 2025, la compañía opera con 8MW de infraestructura. La entrada de Braun Saint proyecta alcanzar 20MW para fin de año. Una ampliación que no solo refuerza su capacidad energética, sino también su compromiso con modelos productivos que reducen emisiones y generan ingresos para productores de hidrocarburos.
El perfil de los fundadores refuerza esta visión. Perelman, con más de 20 años en infraestructura y blockchain, y Cabral Nonna, con experiencia en oil & gas y normativa, construyeron un puente entre lo técnico y lo estratégico. Juntos pensaron una energía modular, móvil, como una neurona digital capaz de operar sin red fija.
BigSur es una empresa que encontró valor donde otros ven descarte. Convierte gas perdido en movimiento blockchain. Reconoce que en el corazón de la economía digital hay algo tan elemental como la energía. Y lo hace con respeto por los recursos, eficiencia operativa y mirada sostenible.
Para los inversores agroindustriales, esta apuesta representa una continuidad en nuevos lenguajes. Antes era la tierra. Hoy es el dato. El impacto sigue siendo real, tangible, productivo. Desde el sur argentino a las entrañas tecnológicas de EE.UU., la familia Braun Saint no deja de sembrar