El PJ y La Cámpora organizan un despliegue sin precedentes
CFK frente a la Justicia: el kirchnerismo quiere tomar la calle

Mientras el kirchnerismo prepara una movilización masiva, su defensa insiste en evitar su traslado físico.
Cristina Fernández de Kirchner se prepara para presentarse este miércoles en los tribunales de Comodoro Py, en lo que promete ser una de las movilizaciones más masivas del kirchnerismo en los últimos años. Mientras tanto, crece la expectativa por la definición judicial sobre si deberá trasladarse personalmente hasta los tribunales o si será notificada a distancia del inicio del cumplimiento de su condena a seis años de prisión por la causa Vialidad, recientemente confirmada por la Corte Suprema.
Desde que se conoció el fallo del máximo tribunal, la maquinaria política del kirchnerismo se activó sin descanso. La noche misma del veredicto, referentes como Máximo Kirchner, Eduardo “Wado” de Pedro, Mayra Mendoza, Juliana Di Tullio, José Mayans, Mariano Recalde y Teresa García comenzaron a delinear una estrategia que va mucho más allá del acompañamiento simbólico. El objetivo: mostrar fuerza política y social en las calles, presionar para que la expresidente no sea trasladada a una unidad penitenciaria y lograr que se le otorgue el beneficio de la prisión domiciliaria.
El miércoles a las 10 de la mañana, el peronismo y las agrupaciones kirchneristas concentrarán en el domicilio de Cristina, en San José 1111, desde donde planean marchar hasta los tribunales de Retiro. Sin embargo, el equipo legal de la expresidente continúa negociando la posibilidad de que el trámite se realice por videoconferencia, un pedido que quedaría en manos del Tribunal Oral Federal 5.
En paralelo, Cristina Fernández ha salido en los últimos días a saludar desde su departamento a la militancia que se concentra en Constitución. Lo hizo tres veces el lunes: a las 15:30, a las 17:30 y a las 20:30, siempre entre cánticos de apoyo como “Vamos a volver” o “Cristina presidenta”, en un clima cargado de mística y tensión política.
Las actividades de respaldo a la expresidente se multiplicaron en todo el país durante el fin de semana bajo el lema “Argentina con Cristina”. El viernes, hubo una reunión clave con sindicatos, organizaciones sociales y partidos políticos. El sábado, los intendentes del PJ coordinaron acciones logísticas para garantizar una movilización “ordenada e impactante”, como la describieron desde el partido. El lunes, en Matheu 130, Máximo Kirchner encabezó un acto a 70 años del bombardeo a Plaza de Mayo, resignificando la fecha en clave política actual.
Hoy martes, el kirchnerismo afronta una jornada decisiva: por la tarde, recibirá en la sede del PJ Nacional a la mesa de conducción de la CGT —alejada del kirchnerismo en los últimos años— y, más tarde, a gobernadores de Unión por la Patria. Axel Kicillof, cuya ausencia en reuniones previas fue notoria, confirmó que participará de ambos encuentros y de la movilización junto a su gabinete y al Movimiento Derecho al Futuro, en lo que se interpreta como un gesto de distensión en su relación con el cristinismo.
“Esta será una de las movilizaciones más grandes de la historia política argentina”, declaró Teresa García, presidenta del bloque de senadores bonaerenses del peronismo. Además, anunció que permanecerán en las puertas del tribunal hasta que la expresidente salga, para acompañarla de regreso.
En definitiva, el kirchnerismo apuesta a que la presión callejera incline la balanza judicial. La posibilidad de que Cristina quede alojada en una cárcel sigue siendo remota, pero la tensión entre lo judicial y lo político ha vuelto a escalar a niveles de máxima visibilidad. El miércoles, en Comodoro Py, no sólo se definirá un capítulo de la historia judicial de la expresidente, sino también el pulso del peronismo en su conjunto.